En la Estación Espacial Internacional, este 25 de noviembre ocurrió la partida de la cápsula Progress MS-17, luego de casi 5 meses de estadía. La cápsula de carga se lanzó el 29 de junio, y se reubicó el 21 de octubre. Su objetivo final fue «servir de basurero» para reingresar de forma destructiva a la atmósfera terrestre.
La Progress MS-17 llegó a la ISS como una cápsula de reabastecimiento el 29 de junio de este año, a bordo de un cohete Soyuz-2.1a, y se acopló al puerto cenit del módulo Poisk.
El 21 de octubre la MS-17 fue reubicada, pasando de Poisk al puerto nadir del módulo Nauka. En este se encuentra un adaptador especial (plataforma tipo anillo), que permite que las cápsulas normales (Soyuz/Progress) se acoplen. La cápsula se llevó consigo ese anillo, descubriendo la zona para que el nodo UM Prichal pueda acoplarse sin problemas.
Estadísticas
La partida de la cápsula Progress MS-17 ocurrió a las 11:22 UTC del 25 de noviembre. Posteriormente esta realizó un encendido de motores que la frenó 118 m/s a las 14:35 UTC, reingresó a la atmósfera a las 15:08 UTC, y sus restos llegaron al «punto Nemo» del Océano Pacífico a las 15:17 UTC. Esto concluyó una misión de 148 días, 15 horas y 40 minutos (145d, 5h y 44m de ellos acoplados a la ISS).
El próximo retorno de una nave Progress será el de la MS-18, actualmente programado para el 31 de mayo de 2022. Aunque, con tanto tiempo, por delante, es posible que la fecha sufra ajustes conforme se acerca el día. La Progress MS-19 se espera lanzar el 15 de febrero de 2022.
Mientras tanto, la cápsula Progress M-UM modificada llevará el nodo Prichal a la estación. Este nodo se acoplará al módulo Nauka, para que este pueda recibir más cápsulas a la vez.