China ha conseguido aterrizar en la luna la sonda Chang’5 con el fin de recoger muestras de su superficie y retornarlas a la Tierra. De completarse, será la primera vez que el gigante asiático lo consigue.
El 23 de noviembre la CNSA lanzó desde Centro de Lanzamiento de Satélites de Wenchang, en la isla de Hainan, un cohete Larga Marcha 5 rumbo a la luna. El cohete cargó Chang’e 5, una sonda formada por cuatro módulos: un orbitador, un módulo de aterrizaje, una etapa de ascenso y una cápsula de reentrada. El 1 de diciembre el aterrizador alunizó en la zona de Mons Rümker en Oceanus Procellarum, situada al noreste de la cara visible de la luna. El objetivo es recoger dos kilogramos de muestras a dos metros de profundidad.
La misión tiene un gran valor científico, ya que las muestras se tomarán en un área de la luna mucho más joven que en las anteriores misiones norteamericanas y soviéticas. Concretamente, es una zona volcánica elevada y dónde hay mucho material basáltico. De este modo, los científicos podrán añadir piezas nuevas al estudio de la historia de nuestro satélite y, por tanto, al de nuestro sistema solar.
De completarse con éxito, esta será la primera misión que se realiza de este tipo desde 1976. Sus predecesores son las misiones tripuladas Apolo y las misiones no tripuladas soviéticas Luna. También, será la primera misión de recogida de muestras lunares de la historia de China.
De este modo, la misión sigue en marcha y se prevé el retorno a la Tierra entre los días 15 y 16 de diciembre. La etapa de ascenso se encontrará con el módulo orbitador y le pasará las muestras. Después, la nave pondrá rumbo a la Tierra de nuevo. El módulo de entrada esta previsto que aterrice al norte de Mongolia.
El siguiente video es una representación de la misión hecha por la CNSA y editada por Space.com. Las imágenes han sido distribuidas por la Televisión Central China (CCTV).
Programa espacial chino
La misión es clave para el Programa de Exploración Lunar chino para mejorar aspectos tecnológicos de los viajes espaciales. Des del descenso a la luna al retorno a la Tierra. Chang’e 5 es la penúltima misión no tripulada a nuestro satélite del programa de sondas Chang’e, nombre de la diosa china de la luna.
La primera parte del programa tuvo el objetivo de alcanzar la órbita lunar y se logró en 2007 con Chang’e 1 y en 2010 con Chang’e 2. La segunda fase consistió en aterrizar dos sondas para explorar la luna y se consiguió en 2013 con Chang’e 3 y en 2019 con Chang’e 4. Esta última hizo historia, ya que alunizó en el lado oscuro de nuestro satélite, algo sin precedentes. Seguidamente, la fase de recogida de muestras la está completando Chang’e 5 estos días y se prevé que en 2024 Chang’e 6 también lo haga. De esta forma se completará el programa Cheng’e. Por último, el programa espacial pretende aterrizar astronautas en la luna en 2030 y eventualmente construir una base en el polo sur del satélite.